Una sorpresiva y abundante caída de ceniza volcánica, proveniente de las emanaciones del volcán Sangay, en horas de la madrugada de este martes 9 de junio de 2020, dejó cubierta a la ciudad de Guayaquil, cuyos habitantes no escondieron su asombro ante el evento natural poco común en el puerto principal.
La calzada de las vías en casi toda la ciudad; así como los techos de los vehículos; las hojas de los árboles; los vidrios de los ventanales; y, toda superficie amaneció con la acumulación de este polvo tóxico que puede causar efectos nocivos en la salud de las personas.
Los expertos han explicado que no se trata de una nueva erupción del volcán, si no de una emanación correspondiente al proceso eruptivo que se inició en mayo del 2019 y que, por efecto de los vientos, llegó hasta las provincias de Guayas, Morona Santiago y Chimborazo.