Freddie Mack de 57 años que vivía en Texas, había sido reportado como desaparecido, ya que eran varios meses que, ni sus familiares, ni sus amigos, sabían nada de él.

Mack que padecía de severos problemas de salud, vivía en la compañía de 18 perros de raza mestiza.

Hace poco, expertos forenses analizaron restos óseos y de cabello humano encontrados en las heces fecales de los animales.

Los resultados de ADN determinaron que los restos pertenecían a Freddie Mack. Lo que no se ha podido establecer es si, los canes mataron a su amo o lo devoraron después de haber muerto por su enfermedad.