Ya tiene un año metido en la cárcel y más de ocho meses de haber dejado de ser Vicepresidente de la República. Sin embargo sigue cobrando 4.000 dólares mensuales como pensión vitalicia.
Daría la impresión de que el delito es premiado en el Ecuador. Jorge Glas fue condenado a una pena de 6 años de prisión por liderar una red de corrupción que se llevó miles de millones de dinero.
El estado le sigue pagando una cantidad que bien podría servir para solucionar el problema de, por lo menos, 10 ciudadanos ecuatorianos honestos, honrados, pero desocupados por los malos manejos de la economía en el gobierno del que Glas, fue el segundo al mando.
2 octubre, 2018