Eran las 21:12 del jueves 6 de septiembre de 2018, cuando el territorio continental del Ecuador se vio fuertemente sacudido por un movimiento sísmico de 6.5 grados de intensidad y cuyo epicentro se ubicaba en Cumandá, provincia de Chimborazo.
La reacción de alarma y temor se produjo en las principales ciudades del país, especialmente en las que se ubican en el callejón interandino, tales como Ambato, Cuenca, Guaranda, Azogues; y, otras del litoral, como Portoviejo, Chone, Manta, Esmeraldas, Babahoyo, Guayaquil, Machala y otras más.
En Cumandá se reportó el colapso de algunas viviendas, sin que se hayan establecido afectaciones personales. La Secretaría de Gestión de Riesgos anunció una víctima de la ciudad de Babahoyo que resultó con fracturas. No se descartan las réplicas, pero con menor intensidad.